¡Guerra a la Guerra! Apelación de los trabajadores portuales de Génova
El CALP (Collettivo Autonomo Lavoratori Portuali) Colectivo Autónomo Trabajadores Portuales de Génova lanzó una apelación al mundo entero para bloquear la guerra y el mercado de las armas.
Traducido al español por Brics-Italia.
Fuera la guerra de nuestras vidas
En los meses pasados, en el puerto de Génova (Italia), una movilización de los trabajadores del puerto bloqueó la carga de materiales bélicos directos en Arabia Saudí y destinados a la guerra en Yemen. Análogas movilizaciones en apoyo al bloque del tráfico de armas tuvieron lugar en otros puertos europeos (Le Havre y Marsilla, antes en Bilbao) contra las naves de la compañía saudí Bahri, que provee armas y medios militares a todo el medio oriente.
Los vientos de guerra no pararon, como demuestran los dramáticos hechos en Siria, el conflicto en Libia y la agresión de EEUU en Iraq. Son conflictos sangrientos, que matan diariamente, devastan tierras, obligan a miles de personas a abandonar sus países para emigrar. El complejo militar industrial es uno de los responsables de esta “escalation” que confabula con gobiernos que aprueban políticas que explotan los recursos naturales en diferentes zonas del mundo. El producto de esto, juntado con una crisis económica que no se puede resolver dentro del sistema capitalista y neoliberal, acaba con una guerra constante en todas nuestras sociedades.
Detenerlos es posible empezando por nuestros territorios. Boicoteando la guerra empezando por nuestra casa. El 12 de febrero (data variable) en Génova llegará una nueva nave cargada de armas, la Bahri Yanbu. Como trabajadores llamaremos toda la ciudad solidaria para juntarse con nosotros y bloquear el enésimo tráfico de muerte. Llamamos a todos los trabajadores, ciudadanos y sindicatos y a las fuerzas políticas a sostener el bloque transformando esta jornada en un momento de lucha contra la guerra y para la Paz entre los Pueblos y entre los oprimidos. Invitamos todos y todas a tomar nuestra apelación.
Desde la producción de armas hasta su logística, desde las bases militares a los centros de investigación, el engranaje de la guerra es grande y amplio y permite a cualquiera y en cualquier lugar de moverse como pueda para construir el bloqueo.
¡Guerra a la guerra! ¡Paz entre los Pueblos!
Texto original.
Fuori la guerra dalle nostre vite
Nei mesi scorsi, nel porto di Genova, una mobilitazione partita dai lavoratori del porto ha impedito l’imbarco di materiale bellico diretto in Arabia Saudita e destinato alla guerra in Yemen. Analoghe manifestazioni a sostegno del blocco del traffico di armi si sono tenute in altri porti europei (Le Havre e Marsiglia, ancora prima a Bilbao) contro le navi della compagnia saudita Bahri, che rifornisce d’armi e mezzi militari tutto il Medio Oriente.
I venti di guerra però non si sono fermati come dimostrano benissimo gli sviluppi drammatici legati alle guerre in Siria, al conflitto libico e all’aggressione statunitense in Iraq. Sono conflitti sanguinosi che mietono vittime giornalmente, devastono territori, spingono migliaia di persone ad abbandonare i loro paesi per emigrare. Il complesso militare industriale è tra i molti responsabili di questa escalation in combutta con governi sempre pronti ad approvare politiche di saccheggio verso le risorse naturali in varie zone del mondo. Il combinato disposto con una crisi economica che non è risolvibile all’interno del sistema capitalista e neoliberista rende la guerra come una costante nelle nostre società.
Fermarli però è possibile cominciando dai nostri territori. Boicottando la guerra cominciando da casa nostra. Il 12 febbraio (la data potrebbe variare) a Genova arriverà una nuova nave carica di armi, la Bahri Yanbu. Come lavoratori chiameremo tutta la città solidale ad unirsi a noi per bloccare l’ennesimo traffico di morte. Chiediamo a tutti i lavoratori, ai cittadini, ai sindacati e alle forze politiche di sostenere questo blocco trasformando questa giornata in un’occasione di lotta contro la guerra e per la pace tra i popoli e tra gli oppressi. Invitiamo tutti e tutte a raccogliere quest’appello.
Dalla produzione bellica alla sua logistica, dalle basi militari ai centri di ricerca, l’ingranaggio della guerra è ampio e diffuso e permette a chiunque e dovunque di mettere in campo in autonomia ciò che vorrà e potrà.
Guerra alla guerra! Pace fra i popoli!