Ecuador y Nuestra América contra el imperialismo

Artículo de Eduardo Piñate R publicado en la web del PSUV

La clase obrera, los indígenas y campesinos, los estudiantes y en general, el pueblo de Ecuador está en las calles, insurreccionado contra el neoliberalismo,como dijo el presidente Nicolás Maduro. Es la respuesta popular, masiva y contundente, a la pretensión del gran capital transnacional y de sus expresiones políticas imperialistas de volvernos al pasado de colonialismo, subordinación y de ignominia.

El detonante fue el anuncio de un paquete de medidas económicas antipopulares propias del recetario neoliberal que el FMI y el Banco Mundial han impuesto desde hace décadas a los pueblos del sur. En Ecuador, apenas el traidor Lenin Moreno hizo los anuncios, comenzó la móvilización popular, que al ser fuertemente reprimida, ha escalado a los niveles combativos de hoy.

Con diferencias en los niveles de agudización de las contradicciones de clase y de la movilización, vemos la respuesta popular a los paquetes neoliberales en Argentina, en Perú, en Honduras, en Colombia, en Paraguay, en Chile y en Brasil, entre otros. Son, junto con Ecuador, países donde se está aplicando con mucha fuerza el recetario neoliberal fondomonetarista; varios de ellos (Brasil, Argentina, Honduras, Ecuador y Paraguay) conocieron experiencias de gobiernos progresistas o nacionalistas, que lograron determinados grados de independencia y entraron en contradicción con el imperialismo estadounidense y vía golpes de Estado o elecciones se establecieron gobiernos reaccionarios, antipopulares y proimperialistas.

Eso condujo a los apologistas del capital y los lacayos del imperialismo en el continente a afirmar que había concluido «el ciclo progresista» en la región, a lo cual respondió nuestro camarada Nicolás Maduro que se venía una segunda oleada revolucionaria, más radical y profunda que la primera. La insurrección del pueblo ecuatoriano y las movilizaciones antineoliberales en el continente, junto a la resistencia y avance de la Revolución Bolivariana y la Revolución Cubana, confirman la tesis del camarada presidente. Lenin Moreno ya no gobierna Ecuador y Macri, Bolzonaro, Piñera, Duque y los otros tienen cada vez más dificultades para gobernar; se sostienen con el apoyo estadounidense y la represión. Nuestra experiencia -la venezolana en los años 90- enseña que los pueblos unidos, organizados y conscientes pueden derrotar al imperialismo y la represión. Vaya nuestra solidaridad con el pueblo ecuatoriano y todos los pueblos que luchan contra el neoliberalismo y el imperialismo. Seguimos venciendo.